Cada vez son más las personas que en los últimos tiempos han barajado la posibilidad de realizar una reforma en su hogar. Existen diferentes factores que influyen a la hora de tomar esta decisión; pueden ser mejoras estéticas, hacer más prácticas las estancias, cambios en la distribución de las habitaciones… hasta razones meramente económicas, pero, ¿Cómo puede una reforma ayudarme a ahorrar en mi día a día?
La respuesta es mejorando la eficiencia energética de la misma, la cual no está reñida con una mejora estética sino que se realizan de manera complementaria.
Y es que cada vez son más las personas que buscan un hogar eficiente, que nos ayude a aminorar el consumo de suministros asociados al día a día.
A continuación, comentaremos una serie de iniciativas que ayudarán a reducir el volumen de las facturas asociadas a la vivienda, convirtiendo tu casa en un aliado para reducir costes cada mes.
Contar con un buen aislamiento
La presencia de un aislante térmico eficaz es un factor clave, puesto que gracias a este se podrá evitar la pérdida de energía de forma constante. Es muy importante que este cumpla su función, puesto que sino estaríamos desperdiciando grandes cantidades de energía y por tanto de dinero sin apenas darnos cuenta,sin olvidar que la temperatura interior disminuirá.
Control de ventanas
A día de hoy nos encontramos con gran cantidad de modelos de ventana, con distintos grosores, marcos, materiales… Además de sistemas como el doble cristal o incluso doble ventanal, que actuarán de forma distinta unas de otras ante los factores externos.
Independientemente del mecanismo con el que se cuente, un uso adecuado de estas también favorecerá la eficiencia de las ventanas.
Ventilar en periodos cortos y a poder ser durante la mañana, el aprovechamiento de la luz solar en las horas de más incidencia o por el contrario bajar las persianas cuando el sol desaparece ayudarán de forma significativa a conseguir nuestros objetivos.
Electrodomésticos
El concienciamiento alrededor del consumo no es una cosa nueva, debido a eso se ha producido un gran avance en esta maquinaria, buscando siempre una mayor eficiencia energética en estos dispositivos.
Por ello se produce una diferenciación entre los modelos en base a su consumo y su eficiencia energética.
No obstante, reducir el consumo puede ser insuficiente para reducir las facturas, esto es debido a que estas se componen del consumo de energía y el precio que pagamos por ella, debido a esto, debemos fijarnos con atención en que tarifa de luz contratar y su respectivo precio.
Agua, un bien preciado
El agua es probablemente el recurso más importante para la vida, debido a eso tenemos que hacer un uso responsable de ella a todos los niveles, actualmente se cuenta con muchos mecanismos que facilitan la reducción de su uso en la vida doméstica, como por ejemplo cisternas o grifos con reguladores que evitan el desperdicio.
Calefacción y caldera
Actualmente es un tema recurrente, cada día más personas ven que hacerle frente a las facturas se ha convertido en un problema, por lo que mirar detenidamente el precio del gas es de vital importancia a la hora de contratar el suministro.
Los termos y las calderas son los instrumentos que se encargan de la climatización de las estancias del hogar y entre los distintos modelos también existen diferencias en su consumo, por lo que actualizar esta maquinaria por una más moderna y eficiente sumará a ese ahorro.
Un buen uso sin llevar al sobreesfuerzo evitará picos en su consumo de energía.
Iluminación del hogar
Es en este aspecto donde, con gestos que son apenas imperceptibles en el día a día nos llevarán a obtener grandes cambios.
Renovar las bombillas, sustituyéndolas por otras de bajo consumo, optimizar las horas de sol para la iluminación interior, eliminar luces innecesarias en pasillos y estancias sin uso o desenchufar aparatos cuando no se estén utilizando son algunos de los trucos que facilitan nuestro propósito de ahorro.
¿Estás pensando en reformar tu vivienda?
